viernes, 9 de septiembre de 2005

Ir de copas, ir de blogs

Como quien entra y sale de los bares de tapas, de vez en cuando voy alternando entre algunos blogs que, no estando entre mis preferencias obligadas (la lista básica y provisional está a la derecha), merecen alguna visita ocasional. Más que nada porque, entre ocho o diez comentarios narcotizantes, destaca a veces alguno que merece la pena leer. Tal le pasa al blog de Justo Serna, que no sólo firma con su nombre real -con cierto afán protagónico, me temo- sino que se implica a fondo en lo que dice: lo defiende hasta las últimas consecuencias. Su última batallita con Hermann Tertsch permite sonreír un rato mientras vagamos ociosos por la pantalla. No deja de ser interesante: los blogs ya forman parte del paisaje de los media en esta selva publicitaria permanente, y lo que se dice en ellos ya traspasa la frontera de la red y tiene eco en soportes mucho más tradicionales. Parece que a Tertsch le importa mucho lo que digan de él, incluso desde las tribunas intangibles de este submundo virtual. El bloguerismo avanza.

Pues resulta que hay un par de entradas en el blog de Justo Serna, recientes, que he leído con el interés del entomólogo: intentando adivinar por qué nos habla de esos autores precisamente y qué nos dice de nuevo, si es que es así. El primero de esos textos, de hoy mismo, retoma el perpetuo tema de Javier Cercas y su novela Soldados de Salamina. He leído tantas cosas sobre el cómo, el dónde, el por qué y el hasta cuándo en los últimos años que se me hace difícil imaginar que se puedan contar cosas nuevas. De hecho, Serna comienza contando la historia ya sabida del artículo aparecido en "El País" ("Un secreto esencial") en 1999, y de cómo este artículo después permitió la elaboración de una trama más compleja que se transformó en novela. Y a partir de ahí también encontramos el meollo del asunto: partimos de un hecho real contado en un formato periodístico y lo transformamos en material literario. La frase de Serna me parece acertada: "No son ficciones en el sentido de espacios completamente inventados sin conexión o sin contacto con el presente o con la historia, sino narraciones en las que hay una historia cierta y añadidos que la completan o la mejoran o la interpretan".

El punto clave lo encontramos, al fin, en la pregunta sobre si Soldados de Salamina es o no es una mentira. O sea, que si partimos de que estamos tratando con materiales históricos, ¿se nos permite alterarlos y manipularlos a voluntad? ¿Tiene eso alguna afectación sobre la verosimilitud de lo narrado? Ya comenté hace unos días, y lo hace Serna también en su blog, la respuesta que Arcadi Espada daba en su libro Diarios, exigiendo respeto y fideldad a la historia: el respeto que se le debe exigir a un periodista, pero ¿por qué a un novelista?. Serna remata uno de sus párrafos con la expresión "no sé", evidencia final de que nos estamos metiendo en terrenos resbaladizos.

Pero hay una coda que quizá sí abre nuevos horizontes, o al menos los une a la última novela de Cercas: es cuando Serna reflexiona de este modo: "En realidad, más que un atentado contra la realidad, cosa que efectivamente comete –como todo novelista--, Cercas corría con esta historia otro riesgo más acuciante: el riesgo de la voz enfática, el peligro de aportar demasiado empaque, un sobrante de gravedad". Por los comentarios que voy leyendo acerca de La velocidad de la luz, creo que el riesgo se ha convertido en hecho y que Cercas ya ha caído en su trampa: el novelista atrapado en su gravedad, convertido en protagonista de su propio libro.

Y para protagonista este otro, de quien Serna realiza una sorpendente, por lo esmerada, biografía literaria: Juan Manuel de Prada. Ya estábamos acostumbrados a ningunear a este novelista, a pasar por encima de su cadáver sin demasiada consideración, y por eso sorprende que todavía haya alguien capaz de analizar la evolución de semejante espécimen. Serna repasa una por una las obras del que fue lanzado en su día (desde las páginas del "Abc", todo hay que decirlo) como la gran promesa de la nueva narrativa juvenil. Era la época de Umbral haciendo de padrino, de Coños y el nuevo Gómez de la Serna, de Las máscaras del héroe y de los premios y, sobre todo, del malditismo y del escritor al margen de las modas. Un outsider perfecto.

Pero ay, siempre los tiempos por venir pueden ser peores: La tempestad y el plagio de Javier Marías (Serna no cuenta nada del plagio, acaso sólo habla de "influencias": ¿no sabe nada?), la cursilería y el ñoñismo (aunque Serna leyó "con interés y con delectación" Las esquinas del aire), las crónicas papales y la beatería: "Se trata de una moralina pesadísima que se corresponde perfectamente con el último Juan Manuel de Prada articulista, tan esforzadamente católico, tan machaconamente creyente y comunitario, un articulista que quiere emular, tal vez, a Chesterton, modelo para el que le faltarían ironía e individualismo". Entonces, ¿a qué dedicarle tantas líneas precisamente ahora? ¿Por qué ese interés por el vacío, esa atracción por los despojos? ¿Por qué me hago eco de ese comentario? Esto de ir de blogs como quien va de copas me parece cada día más misterioso.

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¿Patrias? Ahora lo entiendo: estar lejos de la patria significa no poder comprar, ahora y aquí, expatriado, la cesta british con sus huevos, y tener que esperar a diciembre.

9 comentarios:

Magda Díaz Morales dijo...

Jacobo, en mi opinión no se le debe exigir a un novelista respeto y fideldad a la historia, la novela histórica es un género adonde verosimilitud y veridicción son dos cosas diferentes. Es como si dijéramos, para explicarme mejor, que el Bolivar real, el libertador de América, y el Bolivar de la novela El general en su laberinto del Gabo, fueran el mismo. Y no es así. Si bien se toma de la realidad, al pasar a la obra literaria el autor le da una intencionalidad estética, y esto la convierte en obra literaria, no en historia o testimonio o documental o artículo periodístico o ensayo.

Qusiera comentar, de paso, un comentario que vi en el blog de Serna, dice: "De Cercas se pueden decir muchas cosas, sus novelas son sugerentes aunque muy 'masculinas' " o_0 ¿cómo serán las novelas "muy masculinas"??

Un beso.

Anónimo dijo...

Estimado 'Jacobo Deza'. Soy yo, soy Justo Serna, el mismo que se
expresa 'con cierto afán protagónico'. Te agradezco enormemente la
atención y el detalle con que repasas mi blog y sus últimas
anotaciones sobre Cercas, Prada. Te preguntas por qué volver sobre
cosas viejas. Bueno, lo nuevo o lo actual o lo repentino no es
garantía de interés o de acierto. Yo, por mi parte, creo que la
relectura, la reincidencia, nos descubren aspectos inauditos de
libros o de lecturas que en otro contexto los sábamos por hechos y
sabidos. Creo que prontro escribiré, Jaime, Jacobo, Jacques, Yago o
Jack Deza, sobre Javier Marías, del que ya he escrito:

http://www.uv.es/jserna/Marias.htm

Probablemente no diré nada nuevo sobre 'Corazón tan blanco', por
ejemplo, pero espero que me pase lo que a Maurice Blanchot: "Debo
dejar algo claro: no he dicho nada extraordinario ni tampoco
sorprendente. Lo extraordinario comienza en el instante en que yo
dejo de escribir. Pero entonces ya no soy capaz de hablar de ello”.

Un saludo cordial, JS

Magda Díaz Morales dijo...

Jacobo, no se si conoces al suplemento cultural del periódico mexicano Excelsior, en él hoy han publicado este articulo: "2666
Bolaño salvaje" de Germán Castro, aqui va la referencia del suplemento por si deseas leerlo:

http://www.suplementoarena.com/342/

Muchos saludos

JacoboDeza dijo...

Magda, gracias una vez más por tus aportaciones. Recuperaré las palabras precisas de Arcadi Espada sobre el conflicto realidad-ficción por si merece la pena volver al tema: aunque temo que su proverbial ironía mordaz me haga perderme en la anécdota más que en la tesis que quiere recalcar. Me ocurre mucho con Arcadi; problema mío, sin duda.

A mi me hablan de novelista masculino y pienso en Cela: debe ser que interpreto lo de masculino en el sentido más peyorativo posible: machista y grotescamente excesivo. Pero nunca lo diría de Cercas, ni en un sentido positivo, creo.

Estimado Justo, tus reflejos son encomiables: preferí no avisar en tu blog respecto de mi comentario porque Jaime, Jacobo, Jacques es un personaje algo escurridizo, con muy poco afán protagónico y tremendamente tímido. Las preguntas que me hago suelen ser muy inocentes: ¿por qué la gente escribe sobre lo que escribe?, por ejemplo. A decir verdad, coincido de manera plena con tu respuesta, pues yo también suelo insistir en lo ya pasado, en las relecturas, en los libros que ya dejaron las mesas de novedades hace mucho tiempo. Pero ninguna elección es neutra, y en cada blog vamos conformando un catálogo curioso de nombres y obras que -supongo- deben trazar algún tipo de perfil sobre el que lo escribe. También repasaré esta semana tus enlaces sobre Marías, alguno ya lo conocía: gracias por recordármelo. Mientras, permite que siga abandonándome "a mi salmodia y a mis meandros", cultivando "la disquisición y el desvío", y podamos irnos reencontrando en esta senda y en tus archivos.

Un saludo.

lukas dijo...

Jacobo, he leído una crítica de la obra de Kureishi no muy positiva..., la que me gustaría leer es la de Amis. Buena portada la de este, por cierto!

JacoboDeza dijo...

Por ahora prefiero no saber demasiado sobre esos cuatro libros, me basta con la frase que le dedica "Anagrama" a cada uno en su página web. Claro, trucos publicitarios, pero qué interesante suena esa "indagación sobre la sexualidad, la pornografía y la prensa amarilla" de Amis, o ese "internado de unos adolescentes aparentemente normales, hasta que se va desvelando que son algo asi como el secreto terrible de la buena salud de una sociedad" de Ishiguro. Quizá por ahora lo de Kureishi me interese menos, ya me dirás si hay otras críticas negativas. Y a McEwan, claro, lo tengo como fijo, sigo siéndole fiel por ahora.

A ver si los de "Basta de carátulas" se animan con esta rentrée british.

Anónimo dijo...

Hola, soy Justo Serna.

Jaime, Jacobo, Jacques, Yago o
Jack Deza, me gusta tu blog, que he descubierto recientemente, y estoy en proceso de lectura. Mientras tanto, te mando este obsequio de nuestro común Javier Marías:

http://justoserna.bitacoras.com/archivos/2005/09/13/la_lenta_desaparicion_de_javier_marias

Anónimo dijo...

Where did you find it? Interesting read » »

Anónimo dijo...

Cool blog, interesting information... Keep it UP http://www.seroquelwithdrawal.info/Discountprescriptiondrugs.html